Dónde quedó la inocencia del Ser
Qué fue de su espontaneidad primera
Aquélla que fluyó libre y entera
Aquélla que ya no podemos ver
Fue sepultada al poco de nacer
por hombres que hablaban de esta manera:
“Oidnos bien, ésta es la carretera
dejad de pensar, empezad a creer”
Apuráronse prontas estas mieles
Y la ebriedad trajo ignorancia
Y trajo orgullo, y violencia
Y así, con muy variadas pieles
Los dogmas hicieron la vida rancia
Y así, se perdió la inocencia…